Hablando del amor

Si me preguntas por el amor, no sabría que opinar, no sabría qué decir; es que del amor conozco muy poco. Me he hartado de sentimientos encontrados pero no creo haber encontrado ese amor puro, si ese que todos buscan pero que fracasan en el camino, ese que prometes pero terminas ocultando mientras construyes artilugios dolorosos y sin sentimiento.

Si me preguntas por el amor, te diría que me lo imagino como platón, ese amor desprovisto de intereses y ataduras. Ese amor que se siente mientras respiras, ese que te alegra los días. Un amor que no tiene nada que ver con el físico, con la pasión o con lo sexual. Ese amor que a veces no es correspondido pero ello no causa dolor. Un amor que viene de la admiración, que construye sus bases en la virtud, en el carácter y que ya es perfecto por imaginarlo.

Ese que es difícil de encontrar pero que aparece sin juzgar, niños adolescentes y octogenarios lo pueden disfrutar , puede llegar antes que los vicios, la corrupción y la malversación del corazón, ese que a veces no ves, que lo dejas escapar por buscar un sentimiento carnal, pero ¿Y como voy a saberlo? Si mi camino ha sido torpe, si he sentido púas cuando quiero amar, si he llorado por un corazón que no se marcha, no se marcha porque no ha terminado de llegar. Bueno, es que la relatividad del amor es lo que le da la chispa al corazón. El amor puede ser como tú quieras pero tiene que ser puro, no creo en ese amor que te hace sufrir, en ese que te lastima sin razón, ese que se acaba cuando la luna no alumbra por la mañana. ¿Como alguien se puede atrever a usar la palabra “amar” para conquistar o engañar?, como me vas a decir que amar también es odiar, que llorar de tristeza agranda el amor. Como alguien puede ser tan cobarde que engaña en nombre del corazón… Si me dices que has sufrido por amor, que te han herido, que tienes cicatrices y que ya no quieres amar por culpa del amor, déjame decirte que eso que has probado no es amor.

El amor no tiene dos facetas, el amor no es lo bueno y lo malo de una relación no, si bien es cierto el amor no irradia en todo momento, cuando lo hace se puede notar, y es que el amor es esa sonrisa pura y descontrolada, es ese brillo que se ve en los ojos y que a veces se expresa sin razón. El amor a veces no se comparte y a veces ni siquiera es retribuido pero una cosa si te digo, el amor solo puede ser felicidad, nada tiene que ver con el dolor, con la belleza física o con lo que haces mientras quieres amar. Puedes amar bajo un árbol en medio de la lluvia y puedes sufrir en un lujoso restaurant mientras te embriagas de champagne.

El amor se siente desde los huesos, pasa por las venas y se demuestra con un simple beso… El amor es esa canción que compones sin querer, esas líneas que escribes porque no sabes que hacer. El amor es agarrar las manos, abrazar desde el corazón, es esa sin razón que te alegra el día, el amor es lo que queda después de la pasión, el amor es acariciar el cabello, es apoyar sin juzgar, es escuchar sin responder, el amor es un beso en la frente cuando se necesita, el amor es comprender y entender, el amor es verte y sentirse bien.

Amar es encontrar esa persona que te hace ser la mejor versión de ti mismo, el amor es esa sensación de tener una vorágine en entre el cerebro y el corazón, el amor no tiene dudas, supera miedo, el amor es una chispa para empezar una relación, el amor no se construye desde el deseo de intentar. El amor no es porque te dan ganas de enamorar. Nadie puede controlar el amor, no tiene modales, llega sin avisar, se queda sin que lo invites a pasar, y aunque lo corras a veces no se quiere marchar... El amor no es para cobardes y por eso no está en todas partes, el amor es eso por lo que late el corazón.

El amor es enamorarte de sus ojos, el amor te quita los miedos, el amor elimina los prejuicios, el amor a veces es mirar y sonreír, el amor para mi es eso que siento que a veces no puedo explicar. El amor para mí, es cuando no puedo mentir, es cuando no me permito un "No", el amor para mí no tiene nada que ver con si me aman o no… pero te repito, yo del amor conozco muy poco.